Hoy los medios y foros especializados en retail en español se harán eco hoy de esta microrevolución. Aún no lo han hecho.
Amazon está agregando una nueva solución a su tecnología&ecosistema “Just Walk Out”, combinando su tecnología con la tecnología RFID para que se pueda ofrecer una experiencia de pago más rápida en una selección ampliada de ropa y todo tipo de mercancías.
La tecnología Just Walk Out, es ésa que se está utilizando en tiendas donde los techos se llenan de cámaras que registran todos los movimientos de los consumidores, y al salir de la tienda cargan automáticamente lo que se lleva en sus tarjetas bancarias registradas en el programa de Amazon, de tal modo que el consumidores no pasan por cajeros para pagar. Amazon usa esta tecnología en más de 70 tiendas de su propiedad y más 85 retailers han comprado el uso de la tecnología (supermercados, tiendas de aeropuertos, instalaciones musicales y deportivas..etc). Lo que hemos visto es que en estas tiendas la conveniencia se ha extremado, pero en absoluto han eliminado la presencia de personal ya que los estantes deben reponerse manualmente, por ejemplo.
El problema era que hasta ahora solo se había usado para productos como alimentos, bebidas, comestibles y artículos para el hogar, desde 2018, pero había artículos donde no habían sido capaces de implantar la tecnología por su complejidad. Hablamos sobre todo de ropa. No es lo mismo tecnológicamente detectar una lata de Cocacola, que una blusa de determinada talla, más allá de complejidades como que los consumidores se prueban la ropa, y luego la dejan en el probador o en otros estantes, si no son deseados. Eso afectaría la tecnología Just Walk Out, ya que no sabría qué artículos se estaban comprando o descartando.
Amazon parece haber resuelto esta barrera no resuelta desde 2018, haciendo uso de una tecnología antigua, RFID (identificación por radiofrecuencia),combinándola con su tecnología “just Walk out”. Los productos no empaquetados, como ropa en perchas, sombreros y otros productos blandos, llevan cada prenda una etiqueta RFID única, que se parece a una etiqueta de ropa estándar.
Los clientes ingresan a la tienda, compran, prueban lo que les gusta, y luego salen por una puerta, o pasan la mano sobre un dispositivo de escaneo de palma de Amazon One,, sin pasar por una caja de pago tradicional. Los lectores leen las etiquetas RFID y se carga la información de la tarjeta de crédito.
Esta nueva combinación tecnológica ya está siendo utilizada con éxito en una tienda del equipo de fútbol americano, Seattle Seahawks.
Esta progresión tecnológica por parte de Amazon, abre un nuevo escenario revolucionario para los retailers de moda, pero como pasó desde 2018, será un proceso evolutivo, sin freno, pero lento, hasta que veamos miles de tiendas de ropa donde entremos y salgamos sin tener que pasar por ningún tipo de caja de pago tradicional.