Las cifras del desempleo publicadas en España son sencillamente estremecedoras. Gran parte de esos nuevos parados, son de las distintas industrias que conforman el sector del Retail.
Desde mi punto de vista, se está hablando poco, o nada, de un tema: es imposible que el Retail abra globalmente y de forma rentable, todas sus tiendas el día que se declare que se levanta el estado de alarma.
¿Cómo se hará la apertura de las tiendas?
- Es posible, como ha sucedido en China, que haya una apertura geográfica de las tiendas. Se irá abriendo por regiones o zonas. Y aquí podemos tener un problema, con las empresas que hayan presentado un Erte a nivel nacional, y no segmentado, ¿se le va a obligar a recuperar las plantillas a nivel nacional cuando solo tienen la posibilidad de abrir en alguna zona? Debería ser evidente que no.
- Por sectores. Personalmente creo que se irán abriendo de la siguiente forma
1 fase. Negocios de Retail que tienen menos contacto con el cliente. Aquellos en los que históricamente ha habido en medio un mostrador. Tiendas moda, grandes almacenes, perfumería, loterías …etc
También se abrirán las grandes tiendas de retailers especialistas, pero seguramente se limite el aforo, durante semanas, lo cual es un gran problema para las rentabilidades de estas tiendas tan grandes. Alguien puede argumentar que es lo mismo que les está sucediendo ahora a las cadenas de supermercados, con la gran diferencia que ahora los consumidores están volcando masivamente sus consumos en ese sector en particular, ya que son las únicas tiendas abiertas (junto con farmacias, estancos y poco más). No pueden fragmentar su decisión de compras prioritarias.
Si ya no existía una cadena de tiendas con el cien por cien de sus tiendas rentables en este país, esto agrava el problema. Y nos podemos encontrar con que muchos retailers decidan no abrir ciertas tiendas en un escenario como este de restricciones lógicas de entradas, por motivos de distancia social. Pero es que aunque se permitirá entrar sin ninguna restricción, el consumo seguirá encogido durante meses, y las “tiendas no rentables abiertas” se multiplicarán exponencialmente.
Nos podemos encontrar durante meses conque uno de los mayores empleadores de este país, los distintos sectores que conforman el Retail, fuera masivamente deficitario, con prácticamente todas sus tiendas, locales, restaurantes, cines.. en números rojos, con ventas inferiores a los gastos estructurales de dichas tiendas,locales y demás, y en consecuencia, muchas empresas se obligarán al cierre masivo de tiendas, locales y demás, y por tanto al despido de muchos empleados.
Podemos estar fabricando con un mal enfoque legislativo y estratégico de las autoridades, un apocalipsis del Retail español, que llevará a unos índices de desempleo sin antecedentes prácticamente.
No se puede levantar en un mes el estado de alarma, imponer a unas restricciones (absolutamente lógicas), y a la vez cesar las ayudas. No puede ser que al levantamiento de dicho estado, los retailers de pronto tengan que regresar a la normalidad, lo cual implica plantillas blindadas, pagar con normalidad anterior a la pandemia gastos estructurales como los alquileres , a no tener ayudas, y todo esto en un escenario fracturado durante al menos tres meses, o más. Y esto por supuesto es aplicable a grandes empresas, Pymes y autónomos que tienen que abrir cada mañana una tienda.
¿Ustedes imaginan rentable, por ejemplo, un gran almacén, con restricciones y en un escenario de contracción del consumo? Es sencillamente imposible. Pero aplíquenlo también a la tienda de una PYME.
Y por otro lado, olvidan muchos analistas un dato: España es el país del mundo con más peso en su PIB del turismo.
Muchos retailers viven del turismo de compra, sobre todo en zonas como Cataluña, todo el arco mediterráneo, Baleares y Canarias. Y ya se está hablando de que se prevé que haya un desplome de un 32.4% de la actividad turística.
¿Imaginan ustedes abriendo todas sus tiendas a la vez aquellos retailers que saben que les espera un verano sin apenas turismo, con restricciones de entradas en sus tiendas, y con casi la seguridad de que hallarán un consumo doméstico dubitativo hasta por lo menos una vez que pase el verano?
Es posible que algunos retailers decidirán no abrir algunas de sus tiendas.
A su vez, si cae el turismo, cae el empleo, y si cae el empleo cae el consumo. Muchos empleos que iban a suceder de cara a la temporada de verano, no sucederán.
Fuente : Cinco días.
2 fase. Seguramente se abrirán negocios de Retail como restaurantes. Y como es lógico se implementarán medidas con la seguridad personal de los empleado. Pero también es posible que se establezca una distancia mínimas entre mesas, o incluso un número máximo de personas por mesa, con lo cual la rentabilidad de los negocios caerá en picado.
3 fase. Posiblemente lo último que se abra sean los negocio de Retail en torno al ocio , espectáculos. Por ejemplo, cines. Y sin duda también lo harán con restricciones de capacidades.
Por tanto no se están tomando en cuenta, con el suficiente análisis, esta “dilatada normalización” hasta llegar al día D (de la completa normalidad). Lo cual se puede dilatar hasta el otoño.
Por tanto, es imprescindible que el Gobierno vaya más allá de lo que ha realizado, e incluso de algunas de las peticiones de las grandes organizaciones empresariales. No puede ser que la duración de los ERTEs sean solo mientras dure el estado de alarma. Ya que el Retail español es el gran empleador en España (un hotel, restaurante, ferretería, cine, clínica dental,óptica, supermercado,largo etcétera). Y sencillamente las empresas no podrán absorber todas sus plantillas el día del alta del estado de alarma, pues se encontrarán durante meses con negocio inviables por las restricciones sanitarias, por la falta de turistas extranjeros, y por la contracción en el consumo
Gran parte de la población española trabaja en el Retail o empresas que dan servicio al Retail. Venimos de decenas de miles de tiendas cerradas en 2008. Donde las medidas de ayuda al comercio minorista no fueron acertadas.
Hoy, vivimos en un país de comercios cerrados por causa de fuerza mayor. En un retail de ingresos cero. Y sabemos que de los ingresos cero, pasaremos a los ingresos mínimos durante meses. No sabemos el tiempo que durará esto, pero nunca antes de la llegada del otoño.
Este país de comercios cerrados, o deficitario, no sabemos cuánto durará. Y los que legislan tampoco, pero sin embargo legislan algo tan disparatado que obliga a una industria de plantillas históricamente estacionales a mantenerlas durante un tiempo no definido. Aparentemente es una medida social, cuando es una medida dramáticamente antisocial: están alterando la naturaleza de las cosas, están condenando a muchas empresas a un futuro más que incierto, y por tanto a que cientos de miles de trabajadores se encuentren sin un futuro laboral, al desaparecer muchas empresas
Lo lógico es que se legislara la flexibilización de los Ertes y de las ayudas actuales (e incrementarlas, por ejemplo en el tema del pago de los alquileres de las tiendas cerradas, o en los posteriores meses en semirendimiento). Los Ertes deberían prolongar su duración algún mes más desde el alza estado de alarma por sector y zona geográfica (en el caso de que se decida el levantamiento de forma geográfica).
En un escenario histórico como éste, la clave la flexibilización de las medidas en función de lo que nos diga la realidad. Las empresas deberían poder rescatar porcentuales de plantillas en función de la demanda real (ninguna empresa del mundo se va a hacer trampas y no va a rescatar personal si prevé una cierta demanda), y que esta incorporación fuera de forma escalonada, hasta un máximo por ejemplo, de tres meses. Y por supuesto las empresas deberían seguir beneficiándose durante ese tiempo de las bonificaciones de los seguros sociales.
Si no lo hacemos así, estaremos fabricando algo que vengo negando durante años, el Retail apocalipsis.
Laureano Turienzo. Consultor & Asesor empresas retail
2017-2019: 200 conferencias con más de 50.000 asistentes de 15.000 empresa del Retail, y «one to one» con empresas líderes en 32 países. He asesorado, o han contratado mis servicios, 7 de los 10 principales retailers de Iberoamérica y más de 80 empresas e instituciones en estos 3 años.